Drogsky

Como del 2005.

Que vergüenza la candidatura de Paulina Vodanovic.

Me sorprende que Quilpué se haya transformado en ese lugar que alguna vez ocupó Valparaíso para ese carrete de bandas y chelas.

Dentro de los clichés que he asumido con la edad, es que me gusta escuchar esos discursos de Pepe Mujica, a veces y muchas quizás, muy hippies. Pero el viejo te habla cercano.

Creo que fue una de las etapas mas activas en mi vida en cuanto ir al cine. Y sin embargo esta no la vi, no por que no quisiera, sino porque se fue directamente al VHS. O al cable. Pero ahí tampoco la ví. Está en Prime Video. Una buena película de acción. Para una tarde llena de testosteronas.

En los 40's los gringos establecieron a dedo el precio del cobre y nos hizo bolsa economicamente.
Al final del día, esa fiebre de libre comercio que surgió en los 90s, como país chico, exportador de materias primas, nos favoreció.

Resulta paradójico que el proteccionismo nacionalista venga de la ultra derecha hoy, cuando en el siglo XX vino de las doctrinas Cepalistas desarrollistas. Puedo estar haciendo una analogía equivocada pero se parece mas al colbertismo de la Francia del siglo XVII que otra cosa.

Emilia Perez ===> CODA - CRASH

Al Truecaller se le están pasando como la mitad de los spams, partiendo por las famosas ofertas laborales con voz de IA.
Voy a tener que buscar alternativas.

Suena cruel decirlo, o en este caso, escribirlo, pero cuando los verdaderos artistas se mueren, nacen los héroes, y sus obras son recordadas como mauselos virtuales.
Lo digo, porque ahora todos los eneros, podremos revisitar la historia de Lynch, como lo hacíamos con Bowie.

Pero ojo, son solo dos sectores. Yo fui hace mes y medio y en la entrada te cortan ambos y puedes moverte con libertad dentro. Lo que si, siempre hay un guardia medio pillo que te ofrece ir a lugares que en rigor estan cerrados, por unas monedas.

No tenía idea de que estaba viendo, pero era hipnotico y yo era un pendejo. Quería ser Dale Cooper y tomar café en un lugar así de frío. De ahí me lancé a ver todo lo que ya habia visto de Lynch, pero con otros ojos.

Mi enamoramiento con el cine de Lynch, aunque suene cursi, fue de casualidad. Una mina que me gustaba en el colegio, y con la que conversaba de vez en cuando, me comentó vería una nueva serie que darían en el 13 en la noche, sobre un asesinato. Quizás no vio mas de un capitulo, pero yo no.

Acá en Chile se llamó “Vampiros en Venecia” y estaba catalogada para mayores de 21 años. En el VHS se vendía casi como softporno.

Misma impresión me dejó al ver el documental "Hitler y los nazis" que está en Netflix.

La iñora acá es fan también de la serie esa. Que tiene que la hace adictiva?

Respecto a lo último, no estoy muy de acuerdo. Los Prisioneros hicieron en sus tres primeros discos casi puro rock clasico con algunas influencias del synthpop ingles y del ska de los Clash, pero eso de genuinamente latinoamericano no lo veo por el lado musical, sí en las letras.

Claro que sí a todo eso. Y la cantidad de discos que se editaron ese año y el siguiente fueron muchos y de excelente calidad, pero fue una suerte de espejismo. Me refiero a que los argentinos siguieron editando de forma descomunal y nosotros tuvimos ese veranito de san juan.

Desde la lejanía del tiempo y la torpeza propia de la edad, creía, en esos años, que Chile iba a poder competir con Argentina en bandas y escena musical. La Rock and Pop y la Zona funcionaban como columnistas del Mercurio hablando del Jaguar latinoamericano, pero no en cifras, sino en discos.

Lo de Kon Kan no lo conocía y estoy sorprendido.

Imaginate que echó a su mentor político (Bannon) al poco de llegar a su presidencia anterior. Ahora este gil tiene mas lucas, quizás es lo unico que lo pueda retener un poco.

El porte de esos egos no entra solo en la Casa Blanca.

Cuando me preguntan cómo pasé el año nuevo.

BASTA de "el chileno que..."

Tuitazo te mandaste.

Carla Ballero, extranjera, nos habla de un país en donde no nació, ni donde ha vivido toda su vida.

Supongo es su autobiografía.

Debo reconocer que vi esa película cuando chico porque era para mayores de 21 años y me dejaron verla, pero desde ahí que no he vuelto a retomarla.

Hacer reír, cuesta. Y este hombre tenía la habilidad para hacerlo, detrás de cámara.

Dina Balearte.