Alv🐺Volk

Hace miles de millones de años, una estrella llegó al fin de sus días, estallando en supernova y convirtiendo en polvo todos los planetas, satélites y cuerpos que conformaban su sistema estelar. Una partícula que había formado parte de algún objeto de dicho sistema salió disparada hacia el espacio.

Traer la palabra exacta a los labios, igual que la lluvia sobre la pinaza.

Intento cultivar la sencillez y hasta he impregnado de sal las tierras de mi ambición. Intento hacer de la productividad el mal menor y no la meta. Intento que anteponer la felicidad no sea un cliché vacío. Intento que la habitación de tormentas que habito pueda ser un hogar donde la voz resista.

Pues nada, un día más en este espectáculo de hipnosis colectiva en el que tenemos que fingir estar hipnotizados como todos los demás para que no nos encierren en una mazmorra todavía peor.

Ante la ansiedad del futuro, tu respiración y la mía acompasadas. Ahora.

Seguramente es eso. ¡Anda que iba encaminado! Muchas gracias, duda resuelta.

¿Eso tiene que ver también con las estrellas? Es decir, se supone que vemos la noche tan negra por una cuestión de cómo se filtra la luz, ¿o no tiene nada que ver? Es que he escuchado campanas, pero igual no sé dónde.

Este 2024 he leído más que de costumbre y todavía me sabe a poco. Muchos títulos me han marcado (he tenido buena puntería este año). Destacaría:
- Las indignas, de Agustina Bazterrica.
- La trilogía de los 3 cuerpos, sobre todo "El bosque oscuro".
- Una costilla sobre la mesa, de Angélica Liddell.

Empieza un año y tengo por único propósito ser (más) feliz. Es que este 2025 me apetece jugar en modo difícil. Y si me toca jugar con ella a dobles, seguro que se vienen sonrisas y se aligeran las penas.

Igual ahora que Twitter/X da más asco si cabe, igual la peña se anima y merece la pena volver por aquí.

Nunca verbo carnal, siempre carne de verbo.

Siempre he sido de naturaleza torpe, pero llevo unos días en que he traspasado la frontera de Mr. Bean para transformarme en un personaje de los hombres de Paco. Pero a lo bestia.
Post basado en hechos reales. Cualquier parecido con la realidad es totalmente certero.

Tolerar una injusticia es blindar el sistema que la genera.

Esta sensación de irrealidad arrancándome la vida.

Filtro rojo para realidad infierno con efecto de espiral descendiente y todo en riguroso directo.

Criado como ganado para un fin. Dicen que siempre puede cambiarse el rumbo, yo tan solo veo un principio de inevitabilidad.

Cuando el aislamiento radical (hasta donde llegue en este sistema social que muchos no elegimos) se transforma en el mal menor. Siempre se trató de escoger el mal menor, nunca de buscar el bien mayor.

Veneno en la lengua y las venas. Corrosión interna o daño indiscriminado. Jamás creeré en nada que no tenga el poder de volverme de arcilla para rehacerme. Y una vez rehecho, tardar un poco en darme cuenta de la condición humana.

Puede que ciertos encuentros ocurran por casualidad, pero ten presente que uno se queda por elección.

Ser bueno en este mundo beligerante implica agachar la cabeza y bajar los brazos. Recibir el daño sin venganza y arrepentirse del daño causado aunque se trate de un indeseable el perjudicado.

Se prolonga la caída, no como una hoja otoñal sino como una oscuridad demasiado humeda.

Una puerta de escape, un acabose temporal, un silencio verdadero por unos instantes. ¿Por qué hay que batallar hasta perder la guerra? Ojalá una amenaza en el cielo que nos obligue a abrazarnos o que nos borre.

Un mundo en el que todo se puede comprar, no venderse es resistencia y una clase de libertad a la que todos deberíamos tener derecho.

Poema de Flora Calderón Ruíz.

Muros tan altos como su miedo. Del valor, las ascuas.

No puede existir una felicidad plena permanente como tampoco puede existir una pena inagotable, al menos para él. Aun así parece existir una tierra intermedia que clava una espina en su sonrisa, que no cesa del todo pese a la espina. Sobrevive en ese espacio de felicidad aguada y tristeza liviana.

Esa pequeña revolución que no pudiste contener.

Me gusta la poesía de herida abierta, a borbotones, con las vísceras colgando, a contrapelo; como una exhibición macabra del dolor o una caricia lasciva a la cicatriz.

Un agujero de gusano para volver a ser tú.

Somos seres sociales, nadie es solitario de nacimiento, pero cuando sufres continuamente la decepción de no conectar con otros, acabas prefiriendo la soledad que seguir decepcionándote.