Mónica Naranjo: «Ni de coña participaría alguna vez en Eurovisión»
Tras unos meses de descanso, Mónica Naranjo (Figueres, 1974) inicia la segunda parte de su gira 'Greatest Hits Tour' , en la que la cantante catalana interpreta lo más granado del amplio repertorio que ha ido generando a lo largo de sus tres décadas de exitosa carrera. Y lo hará en Sevilla este sábado 11 de octubre en el Live Sur Stadium.La cita ha generado gran expectación debido a que será el primer show en España de esta nueva propuesta escénica, ya que la primera tanda de conciertos tuvo lugar entre enero y abril en México y Estados Unidos. Más de 50.000 entradas vendió la carismática artista al otro lado del charco, registrando, además, varios 'sold out' en ciudades como Ciudad de México, Guadajara, Los Ángeles o Chicago. Mónica Naranjo es una de las artistas más relevantes del pop español en lo que va de siglo, destacando sobremanera por una portentosa voz, sin duda una de las mejores de todo el país, y por una personalidad arrolladora que la ha convertido en todo un icono de los derechos de las mujeres y los colectivos LGTBI .Intérprete lírica de formación clásica y poseedora de una discografía que abarca desde pop más clásico hasta el dance electrónico, pasando por un casi operístico réquiem o estilos más comerciales, Mónica Naranjo se ha granjeado un gran prestigio tanto entre la crítica especializada, como en el público y sus compañeros de profesión, que admiran su inabarcable registro vocal y su puesta en escena. Como recuerda en esta entrevista, su carrera tomó impulso tras probar suerte en México, país del que regresó a España para imponer la ley de su 'Pantera en libertad' con el éxito de ventas 'Palabra de mujer'. Posteriormente ha colaborado con grandes estrellas de la canción como Luciano Pavarotti, Rocío Jurado, Gloria Trevi o Mina.Al concierto de este sábado en la capital andaluza le seguirán las siguientes fechas: el 18 de octubre en Murcia (Plaza de Toros – Murcia On Festival), el 1 de noviembre en Málaga (Auditorio Municipal Cortijo de Torres), el 22 de noviembre en Valencia (Roig Arena), el 15 de diciembre en Madrid (Movistar Arena) y el 19 de diciembre en Barcelona (Palau Sant Jordi).-Aunque su concierto en Sevilla será un 11 de octubre, en pleno otoño, la previsión para ese día es que las temperaturas rocen los 30 grados. Aunque eso comparado con otras actuaciones suyas en la ciudad tampoco debe preocuparle demasiado…-(Risas) Hace unos años en Icónica, que fue un 4 de octubre, me pilló un calorazo tremendo que me acordaré toda la vida. Cuando hacía el cambio de vestuario durante el show, la ropa que me quitaba chorreaba, como si estuviera pegada al cuerpo de la humedad que tenía, horrible. Antes me gustaba más el verano, pero ahora prefiero temperaturas más agradables.-Esta gira, con la que celebra sus 30 años de carrera, es una de las más ambiciosas de toda su carrera. ¿Cómo definiría el show?-Es que estamos de celebración y hemos tirado la casa por la ventana (risas). Los fans no se esperan el show tan especial que tenemos este año. Totalmente opuesto, por ejemplo, al de Icónica.-¿Qué diferencias habrá respecto a la primera parte de la gira, la que tuvo lugar en América?-En América, por ejemplo, no puedo irme de un estadio sin cantar 'El amor coloca', eso es impensable. Me lincharían (risas). En España pasa algo parecido con 'Sobreviviré'. -Por qué ha elegido un tour con pocas ciudades. ¿Ha llegado el momento de dosificarse?-Lo poco siempre es mejor. Me gusta dejar a los fans con ganas de más. Salvo al principio, que me pegué giras inacabables, luego siempre he apostado por aquello de que lo que se expone poco es bueno. Tanta exposición no es buena. Llegados a mi punto, claro. Si eres un artista que está empezando y tienes la oportunidad, te tienen que ver en todas partes. «Quien no venga a esta gira tardará por lo menos un lustro en volver a verme en directo» Mónica Naranjo Cantante-Quien no le vea en octubre, ¿tardará mucho en volver a verle en Sevilla en directo?-Puede ser. Porque después de 2026 voy a dejar los escenarios un tiempo largo, voy a dejar de girar.-¿Un lustro por lo menos?-Probablemente, sí.-Preparando esta entrevista, he revisitado su gran actuación de 1999 en el programa 'Séptimo de Caballería'. Llama la atención que entonces Mónica Naranjo solo tenía 25 años y ya parecía una artista curtidísima sobre el escenario, pisaba muy fuerte y transmitía el poderío de una cantante ya consagrada.-Es que realmente estaba muy curtida, tuve la oportunidad de construir la casa por el tejado. A mí cuando me destinaron a México me hicieron el gran regalo profesional de mi vida. O sea, allí te curtes así, es espectacular, haces muchísima televisión, conciertos, etc. El artista nunca está parado, da igual que sean las seis de la mañana. Había programas que se emitían a las tres de la mañana y teníamos que cantar en directo. Yo regresé a España con una gran base, una súper base de México y Estados Unidos. Me fui sin saber, porque tengo que ser honesta y decir que me fui sabiendo lo justo, y vine muy preparada. Me curtí muchísimo en esos cinco años que estuve allí.-Ha dicho «me destinaron». ¿Lo explica?-Es que fue tal cual. Yo había firmado con Sony España, pero la verdad es que no sabían muy bien qué hacer con mi producto cuando lo tuvo en la mano. Entonces se hizo un showcase presentando los productos nacionales para América, y a la artista que decidieron darle una oportunidad internacional fue a mí. -Interesante historia…-¡Fue un regalo! En mi vida la especialidad siempre ha sido empezar la casa por el tejado (risas).-Por cierto, ¿por qué cree que ahora no tienen cabida programas como 'Séptimo de Caballería'?-Pues mira, es una cosa que precisamente estuve hablando hace poco con Miguel (Bosé), qué gran idea sería recuperar ese formato. Porque Séptimo marcó un momento muy particular en la televisión española a nivel cultural. Era un programa muy de culto, donde no solo conocías las particularidades del artista sino también su repertorio, tanto el actual como el anterior. Y ahora no hay espacio para eso. Rezo para que vuelva un 'Séptimo de Caballería', y que lo hiciera con Miguel, que es un verdadero experto en la materia, un anfitrión perfecto para este tipo de programas y, sobre todo, porque él es música. Hay muchas joyas de aquel programa y funcionó muy bien a nivel de audiencia.-Otra joya televisiva, 'Punto de partida', su dueto con Rocío Jurado. Las dos voces viscerales, completamente desatadas, aunque con una Rocío Jurado ya bastante mermada físicamente. ¿Cómo recuerda aquella actuación?-(Silencio y lágrimas) Es que Rocío era mi amiga. Rocío se fue demasiado pronto, con 60 años, y me dio muchísima pena, estaba en la flor de la vida. Era una mujer que tenía un gran amor por la vida y también por el público y el trabajo. Respecto a la actuación a la que haces referencia, he de decir que la audiencia nunca supo el esfuerzo que supuso para ella hacer aquella despedida. Fue horrible, porque justamente acababa de pasar la última sesión de quimio, hacía una semana o así. Venía de Houston muy tocada, y ella se metió a ensayar, se metió con todos los artistas. Recuerdo que estaba ensayando con ella la canción y yo estaba siendo como muy comedida, porque era consciente de que ella estaba tocadita, que ni mucho menos estaba al cien por cien, porque al final le habían tocado el estómago, y el estómago es algo vital para cantar, lo utilizamos muchísimo. Enseguida se percató y me dijo: «Naranjito, ¿tú qué estás haciendo?» Se lo expliqué y me dijo: «Yo no lo quiero 'azí', lo quiero 'azí'. 'A er favó' de hacerlo bien». ¡En el directo estábamos las dos desatadas! Era una mujer con tanta seguridad y amaba tanto lo que hacía, que era arte en estado puro. La echo muchísimo de menos.Concierto de Mónica Naranjo en Sevilla Dónde: Live Sur Stadium de Sevilla. Dirección: Isla de la Cartuja, sector norte, 41092 Sevilla (explanada exterior del Estadio de la Cartuja). Cuándo: sábado 11 de octubre (21.00 horas). Precio: desde 51 euros. Entradas: ticketmaster.es-¿Qué se mantiene y qué queda de la Mónica Naranjo de hace 30 años?-La curiosidad, porque la vida hay que verla desde el punto de vista de un niño, hay que jugarla. Los niños son muy curiosos. Mi amiga Gloria Trevi dice una cosa muy bonita: «Cuando una persona se aburre es cuando empieza a morirse», y tiene mucha razón. -¿Qué no queda?-La ingenuidad de que no puede pasar nunca nada malo, de que todo está bien, de que las cosas malas solo pasan en el cine. Pero no, en la vida real pasan a diario. Y precisamente eso es lo que nos curte y nos enseña a crecer. La evolución del alma está en los malos momentos, ahí es cuando se crece, hay que abrazarlos y trascender con ellos.-Más allá de su imponente voz, ¿cuál cree que es el legado que dejará a la música y a la vida en general?-Nunca lo he pensado. No me siento tan importante. Tengo un trabajo que coincide con mi afición y me siento muy dichosa de saber que a través de mi trabajo amenizo la vida ajena. ¿Qué soy yo? Un creador de magia, de fantasía. Eso es lo que hacemos los artistas, crear magia. -Aunque Mónica Naranjo está en otra liga diferente, como símbolo absoluto de la comunidad LGTBI, ¿se ha planteado alguna vez participar en Eurovisión? Un evento con muchísimo público LGTBI.-Ni de coña. Así te lo digo. Me lo han propuesto infinidad de veces, hubo un tiempo que me lo proponían todos los años.-Por cierto, ¿qué opinión le merece Melody y los ríos de tinta corrieron con todo lo sucedido en torno a su actuación en Eurovisión?-No estuve muy conectada a todo lo ocurrido posteriormente. Sí estuve el día del festival, y Melody hizo una actuación de diez cantando, la puesta de escena, etc. Si me preguntas si se merecía un puesto 22, pues rotundamente te digo que no. Cuando tú ves, por ejemplo, que un 'Café Macchiatto' queda en el tercer lugar te preguntas cosas. Pienso que si vamos a presentar truños así a Eurovisión…